Con motivo del 700 aniversario de la muerte de Dante tuve el honor de rendir homenaje a la Divina Comedia junto a un grupo de pecadores estupendos. En la Biblioteca Pública de León de la mano, mejor dicho, de las alas de Mariposa Ediciones, hicimos una representación interpretando nuestros textos. Aquí os dejo el mío que es para comérselo. Si queréis leer también el resto, en la caseta catorce en la Feria del libro de León lo podéis adquirir.
Si vuestros sueños son mayores que vuestros miedos la
hormiga os marcará el camino. 🐜
¡Uy, qué susto señorita! ¡No me mire con esa cara de
acelga!
Me empiezo a caer gorda, usted también se ha dado
cuenta ¿Verdad?
Verá, y para que se apiade de mí, tengo que decir a mi
favor que la suma de semanas, meses y años que precedieron al día D, se podrían
agrupar bajo el nombre de virtuosismo.
Una historia vital intachable hasta que, según la
leyenda, un mamífero que duerme boca abajo desempolvó un arca y sacó una
palabra encerrada bajo siete llaves y conservada con bolas de alcanfor:
confinamiento. ¡Qué tufillo! ¿ehh?
Dicen que no hay nada como una prohibición para que
todos tus sentidos, órganos, aparatos y sistemas confabulen hasta conseguir el
oscuro objeto de deseo.
Estaba la opción de salir siendo mejor persona, pero
me pareció más entretenido armarla gorda, ya puestos, y después de comprobar
que iba al infierno en todas las religiones me propuse desparramarme. Esto me
llevó a empezar por la gula, por eso de que nos íbamos a comer el mundo, me
vino a pedir de boca. Llego a ser Eva en el paraíso y la que se tiene que
preocupar de no acabar en la barbacoa es la serpiente.
Mi templanza me cazó con las manos en la masa una y
otra vez sin atisbo de hacer mutis por el foro.
Era más fácil que se acabaran las series de Netflix
que las palomitas de mantequilla; ¡hasta amasé! ¡Ya hay que tener hambre!
Con el chocolate lo llevaba bien. Empecé a seguir el
"método Simón", e ingería tabletas esporádicas, como mucho una o dos
al día.
Una cosa que no entiendo es que pecar en León sea pecado
siendo el paraíso gastronómico; cecina, chorizo, queso de Valdeón, Prieto
Picudo. Vale que de vez en cuando matamos algún judío, pero no creo que sea
para tanto.
Estaba claro que acabar en el purgatorio iba a ser pan
comido ¿Veis? ¡Estoy obsesionada! Mi lema era "Cuánta más masa, mejor se
pasa".
En aquella época vivía pensando que la canción "ellos
las prefieren gordas" de la Orquesta Mondragón era el nuevo himno
nacional, por lo menos tiene letra que eso anima mucho en los mundiales.
Lo estaba haciendo tan, tan bien, que creo me merezco
el indulto. A las 20:00 me aplaudían. Comer dos paquetes de pipas de una
sentada es de héroes, lo reconozco. Haciendo un gran esfuerzo salía al balcón a
saludar -hay que tener amigos hasta en el infierno- más que nada por si
escasean las provisiones.
La vida me empezó a parecer de toma pan y moja y yo me
volví adicta a estar en todas las salsas. Mi vida era Divina, no niego que
también una Comedia. De cena en cena; del azúcar a la grasa; de bufete en
bufete...libre. Hasta que un día, no recuerdo muy bien cómo, las digestiones
pesadas me dejan un poco amodorrada. El caso es que vi una luz y ahora estoy
aquí. Será que acertó toda esa gente que me decía que iba a explotar ¡Y yo
pensando que me veían cara de petardo!
Ya hay que tener mal gusto atándome aquí entre dos
árboles sin dejarme alcanzar la fruta. Mire, las manzanas para los cuentos de
princesas y brujas, yo los príncipes ya me los busco en Glovo que me ponen más
y como os imaginareis son mis ¡¡¡herrrrmanos!!!
Empiezo a estar un poco empachada de darle
explicaciones que le importarán un pimiento señorita, pero por esto cocretamente rodé, exploté o estoy aquí
hablando con usted.
INMA REYERO DE BENITO
La frase que mas me ha gustado es esa de que " hay que tener amigos hasta en el infierno" pero no lo digo por las provisiones si no por preparar un plan de fuga para escapar.
ResponderEliminarJajsj muy bien visto. Me lo apunto👏🏻
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