-La vida, en
ocasiones, ha podido ofrecernos flores; seamos generosos ofreciendo una rosa a
la muerte.
-Si la muerte es parte
de la vida, ¿por qué magnificarla?
-Amar es sentir la
proximidad en la lejanía, y no sentir la lejanía en la proximidad.
-Aceptar es el paso
necesario para que la frustración se convierta en circunstancia.
-Dime tu capacidad de
dialogar y me dirás de tus capacidades humanas.
-Si la vida es un eco,
¿propiciamos con nuestra actitud el eco negativo?
-Los números o las
cifras, así como la inteligencia, son fríos, no «admiten» emociones.
-humanicemos la inteligencia para
que ésta sea benefactora a la humanidad.
-Malgastamos energías
innecesarias en metas inalcanzables, despreciando lo alcanzable.
-El sentimiento de
frustración es la vivencia dolorosa no elaborada. Su elaboración convierte la
frustración en circunstancia.
-Evitaremos el
sufrimiento innecesario cuando las vivencias dolorosas las transformemos en
circunstancias.
-Cuando desde la
frivolidad prejuzgamos el mundo externo, ¿no será para huir de nuestro mundo
interno?
-¿De qué le sirve al
hombre conquistar el mundo si al final de su pirámide sólo encuentra la
compañía de la soledad?
-Cuando no encuentre
la respuesta lógica a mis adversidades, mi circunstancia personal puede ser la respuesta.
-Miramos con amor a los
ojos del niño; ¿miramos con ira a los ojos del adulto?
Besos no virtuales.
Joan.
Cuando no encuentre logica a mis adversidades ……mi circunstancia personal….
ResponderEliminarAsí es .Gracias por tus reflexiones
Justamente, nuestra circunstancia personal, puede llevarnos a un camino no deseado o, a un resultado incierto o imprevisto.
ResponderEliminarA pesar de ello, nuestra esencia como ser humano,en algún momento dado, puede llegar a revertir, ahora favorablemente, la situación.
Un abrazo desde la distancia.
Joan