lunes, 6 de junio de 2022

SIN MANUAL DE INSTRUCCIONES

 


Esa rasgada madurez acompañada por un toque adolescente y una pizca de inocencia...conforma una personalidad rebelde y admirada por mí.

 

            ¿Por qué dudé de ese ser, que con su inconformismo me transmitía que ELLA no era YO?

  

             ¿Cómo no pude percibir que la vida nos transforma, nos ayuda a crecer, y a entender momentos y situaciones que no queremos adoptar de una forma sumisa?

 

            Me costó mucho entender que, en última instancia, "NUESTROS HIJOS SON HIJOS DE LA VIDA".

 

            Me pregunto, en ocasiones, si este ser, ha superado sus miedos, aceptado sus frustraciones, elegido su forma de vida (independientemente de que me agrade o no), e intente disfrutar

con las dificultades añadidas de este camino regado por injusticias, trabas, zancadillas, abusos.

 

            No será que veo en esa persona, lo que yo quise ser y no fui "EMPRENDEDORA DE MI EXISTENCIA".

 

            Aterrizar en la vida es un sendero contradictorio. Emociones agradables: alegría, gratitud, serenidad, diversión, inspiración, admiración, amor, serenidad, diversión, etc. y por contraposición

están las emociones desagradables: tristeza, asco, miedo, ira, soledad, desesperación, culpabilidad, indiferencia, apatía, celos, dolor, envidia, frustración, duda, depresión, engaño, rencor, etc.

 

            Está claro, que una balanza emocional valorará mi equilibrio, que llega haciendo méritos después de un intenso trabajo interior.

 

ANA ROSA GUTIÉRREZ ÁLVAREZ

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Tu comentario aparecerá una vez revisado por el moderador de la página. Gracias.