Ser resiliente no significa que la persona no experimente dificultades,
desequilibrios, desajustes. Dolor emocional, ansiedad, tristeza, son elementos
comunes en todas las personas que han padecido dichas adversidades, pero de la
persona resiliente sale una fuerza interior que hace que se vaya sobreponiendo
a todas esas inestabilidades.
En un ser resiliente es como si hubiera descubierto una cantidad de
recursos, que estaban latentes, y que le permiten afrontar dificultades
difíciles de superar.
Lo mismo que hablamos de personas resilientes, ya podemos hablar de
organizaciones resilientes y de empresas o grupos humanos resilientes.
El nivel de resiliencia de una persona determina su habilidad, competencia,
capacidad para salir más fortalecida y para recuperarse bajo circunstancias de
fuerte estrés y cambio.
No cabe duda de que en las personas resilientes es como si se activaran sus
áreas ocultas de clarividencia, de luminosidad y de creatividad que parecían
dormidas en circunstancias normales. La resiliencia se convierte en una forma
distinta, nueva, diferencial, de responder ante la vida y sus adversidades.
¿Qué atributos manifiestan las personas resilientes?
1) AUTOESTIMA, CONFIANZA EN SÍ MISMO/A. Una
autoestima baja o exageradamente alta, producen actuaciones de desconexión con
el medio tanto físico como social. Una persona con una autoestima adecuada
dispone de capacidad para marcar límites, pero también para buscar apoyos, y
establecer las distancias físicas y emocionales equilibradas.
2) AUTOCONOCIMIENTO, INSTROSPECCIÓN Y
AUTORREFLEXIÓN. Conocimiento de uno mismo, capacidad para realizarse las
preguntas utilitarias adecuadas ante la situación, mantener congruencia,
honestidad. Reconocimiento propio y reconocimiento de los otros.
3) MANEJO DE LAS CRÍTICAS NEGATIVAS.
4) AUTOMOTIVACIÓN Y COMPROMISO CON UNA IDEA,
CON UN PROYECTO.
5) BUENAS GESTIÓN EMOCIONAL Y EMPATÍA CON LOS
DEMÁS.
6) COMUNICACIÓN POSITIVA Y CON
DIRECCIONALIDAD. ESCUHA ACTIVA.
7) TOMA DE DECISIONES CON FLEXIBILIDAD,
ADAPTÁNDOSE A LAS CIRCUNSTANCIAS.
8) VALORACIÓN DE LA DIVERSIDAD.
9) CREATIVIDAD, RESOLUCIÓN DE PROBLEMAS,
INNOVACIÓN, BÚSQUEDA DE OPORTUNIDADES, INICIATIVA.
10) CAPACIDAD DE CREAR ORDEN, BELLEZA, FINALIDAD A PARTIR DEL
CAOS Y EL DESORDEN.
11) AFECTO Y APOYO. CAPACIDAD DE RELACIÓN, DE ENCUENTRO.
12) PENSAMIENTO CRÍTICO CONSTRUCTIVO. Búsqueda de causas,
responsabilidades, separación de tareas y competencias.
13) NO CATASTROFISMO Y HUMOR. Es una forma de rebajar las
tensiones del momento y sobrellevar los momentos difíciles.
Todo esto en forma dinámica, con capacidad de cambio y adaptación según los
momentos. Hay búsqueda de equilibrio constante entre los factores de riesgo,
los aspectos de protección personal y del entorno inmediato, y los factores de
personalidad.
La resiliencia se teje, se construye, es como hacer una urdimbre bien
entrelazada y reforzada, que se elabora entre la persona y el medio en el que
se están produciendo los contratiempos. Hay una interacción entre variables personales,
variables sociales, ambientales.
JUAN FERNÁNDEZ
De esta reflexión no destco nada en concreto ¡¡Destaco todo en su conjunto!! No le encuentro desperdicio alguno.
ResponderEliminar