jueves, 31 de diciembre de 2020

JOAN SÁNCHEZ-FORTÚN - REFLEXIONES PARA PRIMEROS DE AÑO 2021

 


DIBUJA UN CORAZÓN EN EL CIELO;

CUANDO BAJE A LA TIERRA, NO OLVIDES ABRAZARLO

 

-Aquellos agradables pensamientos que vivimos en momentos de soledad, no olvidemos llevarlos a cabo cuando estemos acompañados.

En los momentos de soledad, los humanos soñamos con llevar a cabo unas actitudes de afecto y de concordia. En innumerables ocasiones, cuando encontramos a esa persona con la que compartir nuestra existencia, debemos evitar las actitudes egoístas que tanto destruye la relación humana y de pareja.

 -No dejemos que el bello pensamiento sólo sea eso. Démosle vida. No dejemos pasar esta oportunidad.

Bienvenida sea la belleza del pensamiento; mejor aún, cuando  este pensamiento nos ayuda a forjar una vida más plena, empezando por el reconocimiento de nuestros errores para no volverlos a repetir.

   -Dibuja en tu corazón fantasías que puedas lleva a cabo, pero no las olvides, para que no mueran antes de nacer.

Démosle vida a aquellas bellas acciones y pensamientos que un día soñamos vividos en soledad, para que no mueran en los momentos de compañía.

   -Seamos capaces de dar afecto; al tiempo que dibujamos un corazón en el cielo, démonos a los demás. Necesitamos y necesitan del abrazo y de la comunicación ahora que tu corazón está aquí en la tierra, para que no se vaya de vacío.

Lo que pudo haber sido y no fue por nuestra indiferencia y desidia en expresar afecto y cercanía a nuestros semejantes, ahora que están aquí en la tierra. Mañana puede ser demasiado tarde.

   -Cuando sientas próximo a ti un corazón, no olvides mimarlo y ofrecerle lo que soñaste un día, para que el día que suba al cielo no te sientas vacío.

Ofrece amor en el presente, para no sentir un vacío en el futuro.

-Cuando alguien te ofrezca su mano —o necesite de la tuya—, no la rechaces, porque así, el día que vaya al cielo, no sentirá tu rechazo.

Uno de los sentimientos más bellos es el de acompañar, antes que rechazar, a nuestros semejantes en su proceso terrenal.  Así, llenamos de vida nuestra vida. En el futuro, nada tendremos que reprocharnos.

 

-Cuando alguien te ofenda, no le guardes rencor, porque cuando vaya al cielo, se llevará tu comprensión.

 

El rencor nos destruye: la comprensión  nos eleva como SERES HUMANOS, al tiempo que favorece y  potencia nuestro proceso evolutivo.

-En la tierra no olvides dar amor, porque cuando vayas al cielo, encontrarás el corazón al que un día diste amor.

Sólo disponemos de una vida para ofrecer amor: no perdamos esta oportunidad a pesar de…

-Llena de amor tu corazón y el del prójimo en la tierra, para que un día, cuando vaya al cielo, no se vaya de vacío, ni tampoco sientas su vacío; el vacío de lo que pudiste dar y no diste, de lo que pudiste amar y no amaste, y de la comprensión que, pudiendo dar, no diste…

…para no sentir en el futuro el sentimiento de frustración y de culpabilidad  por nuestra actitud de indiferencia hacia nuestros semejantes.

Llena tu corazón de amor y de ternura en la tierra para no irte de vacío. 

ENLACE PARA VER EL VÍDEO DE ESTE ESCRITO, REALIZADO POR JUAN CARLOS IBRAIN:

https://www.youtube.com/watch?v=icls4i2WI6w&feature=youtu.be

 


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Tu comentario aparecerá una vez revisado por el moderador de la página. Gracias.